Pity Álvaez asesinó a quien supuestamente era su amigo de cuatro disparos, después tiró la pistola en una alcantarilla y luego se fue a un recital en el boliche Pinar de Rocha.
Durante la madrugada del jueves varios vecinos se comunicaron con la policía alertando de los disparos, incluso del cuerpo de Cristian Díaz en el piso en medio de un charco de sangre. Tras 30 hs prófugo, Pity se entregó a la policía y declaró. Hoy las redes sociales son el circo de lo que las drogas hicieron de este cantante, que con mucho talento pero poca gente que escuche su pedido de ayuda, terminó preso y ahora espera su condena.
El juez Martín Yadarola decidió trasladarlo al pabellón psiquiátrico de la cárcel de Ezeiza, mientras su abogado evalúa pedir que se declare a Pity inimputable.
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