Se trata de una disposición que el gobierno porteño terminará de ejecutar el 31 de marzo y que, según los mismos docentes afectados, contradice la legislación que establece que como máximo cada grado en la escuela primaria debe tener 35 alumnos.

 

Una docente de quinto grado contó que ya está viviendo las consecuencias de la medida que se ejecutará el 31 de marzo porque nadie quiso tomar la suplencia de 15 días para el otro quinto grado porque a fin de mes ese grado ya no existirá más.

Para Luisa Pégolo, directora de la Escuela N 4 del distrito 4, de La Boca, la medida va a implicar que cuatro docentes pasarán a disponibilidad, es decir, pasarán a trabajar en otras escuelas o quedarán cesantes, según sean titulares o interinos suplentes.

Tanto en las escuelas secundarias como en técnicas, donde se dispuso reducir 50 divisiones en las primeras y 25 secciones en las segundas.

La docente explicó que esta decisión del gobierno porteño contadice el decreto 1990/97 que establece un máximo de 35 alumnos por aula.

La Unión de Trabajadores de la Educación y numerosos legisladores porteños se manifestaron «en contra de esta disposición por considerar que es producto de ninguna planificación, aviso previo ni políticas de recuperación de matrícula».

Según un comunicado de UTE, «la Dirección General de Educación firmó una disposición que cierra 143 grados en escuelas primarias de los Distritos Escolares 2º, 3º, 6º, 7º, 8º, 9º, 10º, 12º, 15º y 18º; 53 cursos en escuelas Medias y 25 cursos en Escuelas Técnicas».

En ese marco, anunciaron que marcharán mañana a las 18, a la sede de la cartera educativa porteña, ubicada en Paseo Colón 255, para impedir que se efectivice la medida del gobierno.