El héroe de esta nota se llama Alcides, tiene 27 años y trabaja como barrendero en Pilar. Al hacer su recorrida diaria, escuchó los gritos de una madre desesperada y no dudó en ir a ver qué pasaba. Se encontró con Noah, un nene que estaba sufriendo convulsiones y un paro cardiorespiratorio.

Alcides le hizo las maniobras de RCP sin dudarlo para que el nene pueda volver a respirar lo más rápido posible. Luego, salió en busca de un auto que pudiera llevarlos con urgencia al hospital, un vecino estaba saliendo y enseguida los subió a su camioneta.

Los médicos que atendieron al menos reconocieron que la asistencia en el momento justo fue vital para salvar la vida del nene.

Celebramos que personas cómo Alcides estén dispuestos a ayudar y que la gente aprenda cada vez más a hacer las maniobras de RCP para seguir salvando vidas.