La legisladora porteña María José Lubertino impulsa un proyecto para que los adolescentes puedan acceder a preservativos en forma gratuita y en condiciones de privacidad y confidencialidad en las escuelas de la Ciudad. La iniciativa establece que los profilácticos estén disponibles para los estudiantes secundarios y los alumnos de los dos últimos años del nivel primario, tanto en establecimientos públicos como privados. Junto a los condones recibirán “un instructivo para su adecuado uso e información sobre prevención de embarazo y enfermedades de transmisión sexual”.

El proyecto, que será presentado en los próximos días en la Legislatura, busca favorecer la accesibilidad de los adolescentes a los preservativos en el ámbito escolar. “No se trata de repartirlos a mano alzada, sino que puedan ir a buscarlos, pero sin quedar expuestos..

El proyecto establece que “todas las escuelas de la ciudad de Buenos Aires tendrán provisión permanente de preservativos accesibles para los/las alumnos/as de los dos últimos años del nivel primario, nivel secundario, escuelas primarias para adultos, centros educativos de nivel primario y centros educativos de nivel secundario, en condiciones de gratuidad, respeto a su privacidad y confidencialidad”. Los preservativos, dice la iniciativa, “estarán accesibles junto a un instructivo para su adecuado uso e información sobre prevención de embarazo y enfermedades de transmisión sexual”.

Para la tocoginecóloga de Hospital Durand, especialista en adolescentes, Alicia Figueroa, “está bien que haya disponibilidad de preservativos donde están los adolescentes”. Ellos, y sobre todo los varones, no van a los centros de salud y menos a los hospitales, señaló. “No hay una cultura de que el adolescente necesite control médico. Así que no van a buscar preservativos donde podrían encontrarlos. Pero lo que falta es la educación sexual que les permita incorporar la idea del autocuidado y del cuidado del otro/a. Hoy hay una enorme erotización en la sociedad, que se mete en las casas por la televisión y que les llega a los chicos cuando todavía les falta mucha madurez. Por eso es tan importante que se implemente efectivamente la educación sexual integral como marca la ley y que vemos que no está”, apuntó Figueroa.

La tocoginecóloga Diana Galimberti, directora del Hospital Alvarez, objetó que la propuesta abarque a escuelas primarias. En ese nivel consideró que se debe trabajar fuertemente en educación sexual. “En la secundaria estoy de acuerdo”, indicó. La tocoginecóloga Sandra Vázquez, coordinadora del Servicio de Adolescencia del Hospital Argerich, también enfatizó en la necesidad de llevar la educación sexual integral a las aulas desde el nivel inicial, como marca la ley. “Estoy convencida de que el hecho de que los adolescentes no usen preservativos cuando tienen relaciones sexuales no está vinculado con la falta de acceso. La conciencia del cuidado del cuerpo se adquiere a partir de la educación sexual temprana”, señaló Vázquez, quien da talleres de educación sexual en cursos de séptimo grado de primaria y primer año del secundario.